A poco más de dos meses de que la Corte Suprema firme la extradición, Henry de Jesús López Londoño, alias Mi Sangre, fue extraditado desde nuestro país. El operativo relámpago fue comandado por el ministerio de Seguridad e Interpol y se desarrolló en la madrugada de este jueves. También participaron la Superintendencia de Drogas Peligrosas, el GEOF, el Escuadrón Aéreo y la PSA.
El narco, de 45 años, se enteró media hora de iniciarse el movimiento, según informó Clarín. Lo despertaron y dejaron que se bañe en la cárcel de Ezeiza. Luego, lo subieron a un helicóptero que lo llevó hasta el aeropuerto Ministro Pistarini, donde lo esperaba un avión privado. A las 7.20 despegó rumbo a Estados Unidos, acompañado por dos marshalls (agentes especiales) de ese país.
En Florida, será juzgado por el delito “de asociación ilícita o concierto para delinquir para distribuir una sustancia controlada a sabiendas de que dicha sustancia se importaría ilegalmente a ese país”.
El narco estaba detenido en Ezeiza desde 2012, cuando fue capturado mientras estaba por cenar en un restaurante de Pilar, Buenos Aires. Pese a los intentos de evitar la extradición y hasta un supuesto plan para fugarse, deberá enfrentar el gran temor de quien fuera el símbolo de los narcos colombianos, Pablo Escobar: enfrentarse a la Justicia de Estados Unidos.