Capilla del Monte no sale de la conmoción por el asesinato de María Rosa Ravetti (59) en manos de su hija, Celeste Rodríguez, que la asfixió. La joven de 33 años confesó el crimen y quedó detenida bajo la carátula de homicidio calificado por el vínculo.
+ MIRÁ MÁS: A días de la sentencia, los familiares de los rugbiers fueron a visitarlos al penal de Dolores
Aunque el suceso sorprendió al valle de Punilla, los posteos en redes sociales de la imputada anticipaban en cierta forma el trágico desenlace.
De acuerdo a las publicaciones, Ravetti habría estado en un delicado estado de salud, por lo que Rodríguez estaba a cargo de su cuidado. "Estoy tan cansada, física y mentalmente. No poder vivir normal, ocuparme de mis hijas, de mi vieja que está remil enferma porque es peor que una nena de dos años", comienza uno de los mensajes subió a su perfil de Facebook el mismo miércoles.
Luego de manifestar algunas recriminaciones a familiares y allegados por no haberla ayudado, enfatizó en el estrés y el cansancio de cuidar a su madre. "Me va a dar un ACV, intento ser fuerte por mis hijas pero no doy más. (...) Si esto es vivir, pues ya no quiero", reza otro extracto del mismo posteo.
Cuatro horas después del primer comunicado, publicó otro más corto pero mucho más fuerte: "Bueno. Pedí mucho tiempo ayuda. Nadie me ayudó. Nadie respondió. Espero que mis hijas estén bien. Dios, perdoname".
Conflictos previos
De acuerdo al testimonio del periodista Ariel Luna en diálogo con Buenas Noches Córdoba, los vecinos de la zona conocida como El Faldeo contaron cómo era la relación entre madre e hija.
Relataron que María Rosa Ravetti estaba postrada hace más de dos años, que la relación con su hija no era la mejor y que solían discutir.