Mario Luis Pereyra (40) estuvo condenado a prisión perpetua por un homicidio ocurrido en 2001. En 2022 salió de la cárcel con libertad condicional y esta semana volvió a caer preso por otro crimen.
La Justicia lo acusa por el femicidio de Ana María Aristimuño (54) en la localidad bonaerense de Trenque Lauquen. La mujer fue asesinada en abril. Junto a la víctima encontraron una soga que contenía ADN de Pereyra, revelaron los investigadores.
+ MIRÁ MÁS: Le estaban por robar y se defendió a las piñas: el video de la pelea
El acusado había sido detenido en mayo, pero su abogado defensor apeló y la Cámara le dio la razón, indicó Clarín. Sin embargo, la prueba genética que se conoció el miércoles derivó en la nueva orden de detención.
Pereyra está imputado de homicidio doblemente agravado por violencia de género y criminis causae. El ataque ocurrió el pasado 22 de abril en la casa que Aristimuño, una docente bonaerense, compartía con su madre, quien no estaba en el momento del hecho.
Antecedente asesino
El único sospechoso por el crimen de Aristimuño estuvo condenado a prisión perpetua por el asesinato de la almacenera Herminda Semino, en la misma ciudad de la provincia de Buenos Aires.
La Justicia determinó que Pereyra atacó a la víctima en su comercio en septiembre de 2001. La mató a puñaladas para robarle. Por este caso recibió la máxima pena, hasta que en 2022 consiguió la libertad condicional. Un año después vuelve a afrontar una grave acusación.