Sebastián Scriva fue sorprendido por los dos delincuentes en la puerta de su local, en una concurrida esquina de General Madariaga, este domingo. Les entregó 8 mil pesos que tenía en el bolsillo, no se resistió y uno de los delincuentes le dio un disparo en el pecho adelante de su esposa. Cayó en la vereda malherido. Su mujer pidió ayuda desesperada y a los gritos. En una ambulancia, lo trasladaron a un hospital pero no resistió y falleció.
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Los malvivientes huyeron del lugar. Más tarde se metieron en un bar de la zona llamado “Lukovo”. Bebieron alcohol hasta desconocerse y se fueron. Según contó el hombre que los atendió pagaron 4 mil pesos por las botellas que se tomaron. A unas pocas cuadras del lugar, chocaron con un auto y cuando los fueron a atender descubrieron que eran los motochoros que asaltaron y mataron al comerciante.
Scriva tenía 60 años de edad. Los asesinos apenas 18 años. En las cámaras de seguridad de una ferretería quedó grabada la dramática secuencia del disparo. El material ya está en manos de la justicia. A uno de los ladrones, le sacaron 3.800 de los bolsillos que era lo que les quedó del botín robado.