Leonela González estaba almorzando con sus compañeros en la escuela primaria 197, el miércoles pasado. A su alrededor había docentes y las personas que ayudan todos los días con los alimentos. De repente, se ahogó. En pocos segundos, su aspecto cambió y se desataron escenas de desesperación. Algunos intentaron ayudarla pero nadie supo qué hacer exactamente para sacarla del terrible cuadro.
En medio del pánico y los gritos, alguien llamó a una ambulancia que tardó demasiado en llegar y cuando lo hizo ya era demasiado tarde. La alumna no tenía signos vitales.
El caso conmovió a los vecinos de la localidad bonaerense. Se preguntan por qué no había personal preparado para implementar un mecanismo de RCP.
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La niña fue sepultada en medio de un cuadro desolador. Los familiares y amigos no pueden entender cómo una niña sana terminó así. En la escuela, hubo duelo y ahora los responsables quedaron bajo la mirada de la justicia.
Un vecino testigo de las dramáticas escenas estaba asombrado. “No podemos creer lo que pasó, porque la ambulancia fue llamada cuando pasó el hecho y tardó mucho en venir. Tampoco se entiende por qué alguien del colegio no agarró un auto o un remís y la llevó al hospital más cercano para que intentaran salvarla”, le dijo al sitio Crónica.