Después de un fin de semana en el que el país lo señaló por haber reducido la pena del asesino de Micaela García, el juez Carlos Alfredo Rossi pidió licencia médica por depresión. Lo hizo en el juzgado de Ejecución de Penas de Entre Ríos, el mismo en el que el 1º de julio del 2016 tomó la decisión de liberar al violador Sebastián Wagner.
Aquel fallo avanzó pese a múltiples advertencias que subrayaban el peligro que Wagner implicaba. Tanto el Equipo Técnico Criminológico, el Consejo Correccional de la Unidad Penal Nº 9, donde estaba alojado el criminal, y el Equipo Interdisciplinario del Juzgado donde trabaja Rossi habían desaconsejado la liberación. El juez no lo tuvo en cuenta y todo terminó con el crimen de la joven de 21 años que conmociona a la sociedad.
Múltiples críticas
Millones se expresaron en las redes, otros miles salieron a las calles a pedir la destitución y hasta el Presidente Macri lo cuestionó. "El sistema se equivocó o el juez Rossi no entendió la dimensión de su tarea. Pero este tipo de jueces no los podemos tener", señaló el domingo.
Mientras tanto, avanza el pedido de distintos diputados entrerrianos para que Rossi no sea más juez. Lo acusan de falta de idoneidad y mal desempeño en la función.