Claudia Schaefer pasó los últimos minutos de su vida en una escena de sangre, locura y horror en la casa del exclusivo country Martindale de Pilar, provincia de Buenos Aires. La autopsia reveló detalles escalofriantes y confirmó que el corte que la mató fue en el cuello, con su marido atacándola por detrás.
Las heridas en las manos demostraron que la víctima intentó defenderse. La falange de un dedo estaba prácticamente cortada y uno de los dos cuchillos que utilizó Fernando Farré terminó con la punta doblada, signo de la saña del asesino.
Además, según publicó la agencia Télam, habría recibido una fuerte trompada en el rostro y puntazos múltiples en el pecho. Este último dato indica que el hombre siguió atacando a la mujer de 44 años en el piso, cuando ya había muerto.
Por el crimen, Farré está detenido en La Plata, mientras su abogado asegura que "no recuerda cómo sucedió el hecho". "Hace dos meses se metió a un tratamiento psicológico y psiquiátrico, le indicaron antidepresivos, relajantes musculares, Clonazepam, pero ese día no tomó las pastillas", detalló. Los tres hijos de la pareja, que se estaba separando, están al cuidado de la madre y el hermano del sospechoso, afirma Clarín.