La joven de 23 años llegó hasta el hospital Domingo Funes de Santa María de Punilla junto a su madre. Cuando los médicos la revisaron detectaron que la paciente había tenido un parto y avisaron a la Policía.
Los agentes acudieron a la casa de la familia, ubicada en la calle Lisandro de la Torre de la ciudad de La Falda. Allí encontraron una beba recién nacida que aún estaba con vida.
Urgentemente la trasladaron al hospital pero cuando llegó ya había muerto. El informe preliminar de la autopsia señala que murió de shock cardiogénico y se desangró fuera de la vivienda.
El fiscal de Cosquín, Martín Bertone, imputó a la madre por homicidio calificado por el vínculo.