Constanza Santos tiene 22 años y el martes pasado se dirigió junto a su bebé a la sede del Banco Nación del centro de la localidad de San Isidro para realizar un trámite. Después de más de una hora de demora, su hijo comenzó a irritarse.
La joven madre salió de la entidad bancaria y cruzó hasta una plazoleta ubicada en las calles Belgrano y Acasusso. Allí se sentó en un banco para darle la teta a la criatura de 9 meses.
A los pocos segundos, llegaron dos jóvenes mujeres policías para pedirle su documento y el del bebé. Una de ellas le dijo que no podía amamantar en la vía pública porque una ley lo prohibía. Constanza comenzó a discutir con las servidoras públicas, mientras el pequeño lloraba.
“Les pedí que me dijeran cuál era la ley que avalaba eso y por qué me tenía que retirar, o que llamaran a un superior”, contó la madre. “Me tuve que parar, porque una me agarró del brazo y la otra me decía que me iban a llevar por resistirme a la autoridad. Me tuve que ir con el bebé a upa llorando, el cochecito y la mochila”, señaló Constanza.
Lo insólito y repudiable no terminó allí: nadie quiso tomarle la denuncia. La joven fue a dos comisarías, un juzgado, una fiscalía y la Comisaría de la Mujer, pero nadie aceptó el reclamo. “En la Comisaría de la Mujer me dijeron que sólo manejan violencia de género y familiar, y dicen que lo mío no fue un delito porque no me pegaron ni nada”, relató.
Al difundirse el caso, el municipio de San Isidro confirmó que el amamantamiento en la vía pública no constituye ningún tipo de contravención o falta y pidió a las autoridades de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires que investiguen el caso.
Mientras tanto, en las redes sociales, comenzaron a convocar a una juntada denominada "teteada masiva" que se realizará el sábado a las 15 en la misma plazoleta donde expulsaron a Constanza.