Sebastián Juárez, uno de los policías implicados en el asesinato de José Ávila en julio de 2020, fue liberado. Aunque continúa imputado por encubrimiento agravado por el crimen del vendedor ambulante, el cabo fue excarcelado, lo que despertó la indignación de los familiares dela víctima.
Johana Jaime, esposa de José Ávila, habló con Telenoche y expresó toda su bronca: "Estoy triste con la justicia que tenemos. Me parece injusto que salga. ¿Cómo va a salir una persona que sabía que su compañero había disparado? Sabía que mi marido estaba tirado y podría haber llamado a una ambulancia. Podría haber salvado a mi marido".
Después continuó con su lamento por la medida judicial: "Se sacó una foto para probar que estaban en la plaza de Villa el Libertador y después se fue a su casa a dormir, sin avisar nada".
+ MIRÁ MÁS: Crimen del ferretero: los sospechosos fueron indagados y negaron todo
La hermana de José, Yohana, también manifestó su malestar por la excarcelación de Juárez: "Para mí es una burla que este chico esté en libertad. Le pido al señor juez que cambie para un futuro mejor de los hijos. La verdad es que no entiendo esta resolución".
"No es justo que lo larguen a él. ¿Qué esperamos? ¿Que mañana o pasado esté de vuelta con un cargo policial y que vuelva a encubrir un caso o que mate a alguien? Porque él también mató a mi marido, en cierta parte", sentenció Johana, con la indignación a flor de piel.
+ VIDEO: La impotencia de la familia por la liberación de Juárez:
El caso
En la madrugada del 4 de julio de 2020, José Ávila se dirigía en moto hacia Villa el Libertador para empezar su jornada laboral. Según la causa, iba con otra persona que tenía pedido de captura. Al llegar a un control policial, -siempre según la acusación- los motociclistas lo evadieron y se refugiaron en la casa del acompañante, a pocas cuadras.
Los dos policías que estaban en el retén los siguieron y se detuvieron en la vivienda. De acuerdo a la causa, mientras el cabo Juárez se quedó en la moto, el suboficial Lucas Navarro disparó contra la puerta del lugar. El balazo impactó en el abdomen de José, que murió.
Después del hecho, los uniformados se retiraron de la escena sin asistir a la vítima y sin dar aviso a ningún superior, según la acusación. Los vecinos llamaron al 911 al escuchar los gritos agonizantes de Ávila. Otros policías llegaron al lugar y, tras hablar con el compañero del fallecido, supieron el accionar de Navarro y Juárez, el supuesto encubridor. Esa misma tarde, ambos fueron detenidos.