Un día después de que Luciano Butassi, de 37 años, cayera detenido en Pilar tras permanecer prófugo durante una semana, apareció ahorcado en su celda de Tribunales Judiciales de Rio Tercero. El joven era buscado intensamente luego de agredir a su expareja, atacar a un policía hasta desmayarlo, robarle el arma reglamentaria y huir en un patrullero, que finalmente dejó abandonado en la zona rural, en cercanías a la localidad cordobesa de San Agustín.
Luego de este inesperado desenlace, la mamá del hombre fallecido dialogó con Telenoche y aseguró: “Estaba acorralado. La Policía lo perseguía todo el tiempo, tenía una obsesión con él. Huyó por una situación de presión”. Además, agregó que un jefe de seguridad "le garantizó la integridad de su hijo".
La mujer insistió en que no está de acuerdo con el testimonio de su expareja, Cinthia Sánchez –quien podría ser dada de alta en las próximas horas tras sufrir quemaduras en sus miembros inferiores-. “Quiero que se esclarezca cómo murió, si fue inducido, presionado o decisión de él. Nunca me habló de querer morir. Él quería vivir”, concluyó entre lágrimas.
+ MIRÁ MÁS: Tragedia en la obra de la nueva Legislatura: denuncian fallas en las medidas de seguridad
Familires de Butassi escribieron mensajes con fuertes amenazas a Sánchez en las redes sociales. Uno de los textos fue publicado cuando Butassi estaba prófugo, es decir, antes de que muriera.
Por el hecho, la Fiscalía de Instrucción, a cargo de Andrea Heredia Hidalgo, solicitó que fueran procesados los cinco funcionarios (2 policías y 3 penitenciarios), a cargo de la custodia de la alcaidía de la sede judicial en el momento de la muerte del detenido.
Desde el Polo de la Mujer explicaron que "un hombre que se quita la vida es el mayor acto de violencia contra la mujer porque el trauma que significa es muy difícil de procesar". También consideraron que para una mamá es "difícil aceptar que su hijo es un golpeador de mujeres" y por lo general "creen en el relato del victimario".