"Cuando una mamá pierde un hijo, seguimos siendo mamás. Nuestros hijos se fueron pero nosotras seguimos siendo sus mamás. Ese título tan maravilloso sigue más latente que nunca. Somos mamás en duelo".
Así comienza el mensaje de Verónica Mutal, una mamá de 37 años que compartió una profunda reflexión después de perder a uno de sus dos hijos a causa de leucemia linfática aguda.
Santi tenía dos años y ocho meses cuando le diagnosticaron la enfermedad. Tiempo atrás, su mamá contó cómo fue vivir este doloroso proceso durante dos años.
Fuerza que inspira
Lejos de esquivar el tema, Verónica le pide a la gente que no lo evada, alentándola a perder el miedo a hablar de la muerte y de cualquier pérdida importante. "Por favor no nos tengan miedo. Sufrimos, sí, una barbaridad. Lloramos y mucho pero no nos tengan lástima. Podemos llorar y hablar y reír. Todo al mismo tiempo", dice muy convencida.
"No nos tengan lástima. Podemos llorar y hablar y reír".
De una manera conmovedora, Verónica explica por qué no está enojada con lo que le pasó. Invita a preguntar, a hablar, a reflexionar sobre la enfermedad y la pérdida de su hijo.
+ VIDEO: El inspirador mensaje de Verónica:
“Si querés preguntarme de su enfermedad, de su muerte, preguntame. No me molesta, no me trae más dolor… Lo que esperamos, así como esperamos de todos los temas de nuestras vidas, es que nos hables con respeto, con amor, con interés”, relata con crudeza.
Así, la mamá de Santi detalla de una manera muy sencilla por qué es mejor dialogar: “Muchos creen que como perdimos a nuestros hijos, mejor cambiar de tema, no recordarlo para evitar que se ponga triste. Pero es todo lo contrario: nos hace más felices aún darnos cuenta de que su recuerdo sigue vivo en ustedes”.