El encuentro fue convocado por el Defensor del Pueblo, Mario Decara, con el objetivo de que todos los sectores involucrados hagan su aporte para el consenso sobre la futura ley de bosques de la Provincia de Córdoba.
Decara expresó que la primera necesidad es "avanzar sobre la definición concreta de lo que tiene que ser el mapa de bosque nativo de la provincia". "Desde la Defensoría entendemos que, en realidad, el bosque nativo que ha logrado sobrevivir es muy poco. El que merece estar en la zona roja apenas puede llegar a un 3, a un 5 por ciento de la superficie de toda la provincia. Puede haber poco más de un 10 o quizá hasta un 14 por ciento de una zona intermedia.Y finalmente un 4 o 5 por ciento más de una zona de escaso valor pero que todavía merece ser protegido", señaló.
El Defensor dijo también que "nuestra posición es, por supuesto, la defensa a ultranza del poco bosque nativo que queda en la provincia. Pero es necesario advertir que la mayor parte del poco bosque nativo que queda está en el arco noroeste de la provincia. Este es un arco que va del departamento Minas, Pocho, pasa por Cruz del Eje, parte de Ischilín, Totoral, Sobremonte, Tulumba, Río Seco. Y esta es la zona más postergada de la provincia de Córdoba. En varios de estos departamentos tenemos crecimiento demográfico negativo y en otros un crecimiento demográfico apenas significativo, con zonas con bolsones de pobreza estructural realmente alarmante".
Decara expresó que "ya no es suficiente proteger el poco bosque que ha quedado. Aquí hay que ver una política de incentivo para que no solo conservemos lo poquito que ha quedado, sino que haya recría y reforestación. Y habrá que encontrar la vuelta para que los productores del arco noroeste de la provincia tengan estos incentivos para proteger lo que queda y para avanzar dimensionándolo. Si no, de ninguna manera va a resultar suficiente lo que se está haciendo y no va a ser feliz lo que se decida si no se atiende esta problemática. No podemos equivocarnos".
“Todas las disertaciones han sido excelentes, de un nivel técnico alto y que sirven para clarificar conceptos. Y todo esto debe plasmarse después en la ley de bosques que todos queremos. Son de nuestra parte aportes para lograr el consenso y nos preocupamos en consecuencia de ello de que en estas reuniones estén los legisladores Y ahí viene el valor de este tipo de reuniones: que los legisladores accedan a opiniones técnicas a información a gráficos como los hemos visto acá en la presentación que les sirvan para poder llevar al recinto la mejor posición”, destacó Decara.