Estaba en una granja agrícola de la cárcel de San Luis cuando escapó. El prófugo es Carlos Alberto Figueroa, condenado a prisión perpetua por asesinar en 2004 al kinesiólogo cordobés Darío Gramaglia en la capital puntana.
Figueroa se fugó el domingo el 30 de abril del establecimiento que reúne condiciones de seguridad mínima, considerando que allí son destinados presos con buena conducta.
El padre del hombre asesinado hace 19 años manifestó en diálogo con Noticiero Doce que si el homicida "no se escapó antes fue porque no quiso". "Yo vi fotos y las medidas de seguridad eran cero", advirtió Walter Gramaglia.
+ VIDEO: la advertencia del padre del kinesiólogo asesinado:
Comentó que en febrero le enviaron una notificación por la "semi libertad" de Figueroa, teniendo en cuenta que había participado como querellante en la causa.
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"Es completamente absurdo. Querían que yo dijera que 'sí, lárguénlo al que mató a mi hijo', que lo premien llevándolo a esa esa granja", cuestionó Gramaglia.
El padre de la víctima señaló que "lo de la buena conducta que hace alusión el jefe de la penitenciaría es completamente contradictorio porque era un tipo pesado adentro y afuera".
"Sigue vinculado con gente de poder, por eso esta fuga es con gente que lo ayudó de adentro y de afuera", afirmó Gramaglia ante la fuga de Figueroa.