El pequeño de dos años fue encontrado muerto en el pozo de deshechos de un tambo ubicado a seis kilómetros del noreste de la localidad de Porteña.
El nene desapareció en un descuido de sus padres. La abuela lo encontró minutos después y lo llevó a la casa, donde personal policial, bomberos y un servicio de emergencia constaron la muerte. Al parecer, se habría ahogado, ahora le realizarán la autopsia para determinar las causas de la muerte.
El caso está ahora a disposición de la fiscalía de turno de San Francisco a cargo de Leonor Failla.