Confirmado: el arma que le quitó la vida a Nisman deja rastros de pólvora en las manos de quien dispara. Dudas: según las muestras tomadas en la mano del fiscal, estaba limpia y sin restos del explosivo.
Ante ese panorama, las sospechas y teorías sobre la muerte del funcionario que denunció a la Presidenta por Encubrimiento a Irán tomaron nueva fuerza.
En el barrido electrónico realizado en Salta, reprodujeron las probables condiciones en las que se disparó el arma. Cubriendo con piel de chancho a un maniquí, dispararon y tomaron tres pruebas. La primera inmediatamente, la segunda a las 10 horas y la tercera 20 horas después.
Las tres dejaron rastros de pólvora en la piel, lo que contradice los test tomados sobre la piel de Nisman, que dio negativa. Entonces, las opciones son tres: que la policía haya tomado mal la muestra de la mano, que le hayan limpiado la mano tras su muerte o que Nisman no se haya dispararado. Semanas atrás, un informe de Jorge Lanata denunció irregularidades en el operativo en su departamento.