La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró este lunes que no recomienda el uso de edulcorantes "para controlar el peso corporal o reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles" como el cáncer o la diabetes.
La autoridad sanitaria llevó a cabo una "revisión sistemática de la evidencia disponible que sugiere que el uso de los endulzantes no azucarados no confiere ningún beneficio a largo plazo en la reducción de la grasa corporal". Es decir: no ayudan a bajar de peso.
A excepción de los pacientes de diabetes, la recomendación de la OMS es para todas las personas. Incluye todos los edulcorantes: naturales y sintéticos, ya sea que se usen para endulzar, o bien que ya estén añadidos en bebidas o alimentos. Los más comunes son el acesulfamo K, aspartamo, ciclamatos, advantame, neotame, sacarina, sucralosa, stevia y derivados de stevia.
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Consultada por ElDoce.tv, la licenciada en nutrición Jésica Cohen (M.P. 3071) explicó que "los edulcorantes son sustancias que carecen de todo tipo de valor nutritivo".
Manifestó que el problema con el consumo de los edulcorantes es que no tienen glucosa, a diferencia del azúcar que reemplazan. "El cerebro humano pide dulce (en realidad, glucosa), pero la glucosa no llega y este órgano nunca es satisfecho, lo cual genera un círculo vicioso".
Este fenómeno, aclara Cohen, genera un "mecanismo de adicción" en el que los receptores cerebrales de lo dulce exigen un estímulo cada vez mayor. Comprobado que ni el azúcar ni el edulcorante son tan sanos, la alternativa que propone la licenciada es la siguiente: "Volver a la alimentación real: consumir los alimentos tal como son, ya sean materia prima o infusiones".
Y añadió que "en la práctica quizá es necesario ir dejando los endulzantes agregados de manera paulatina, hasta llegar al consumo cero".
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Los resultados publicados por la OMS también demuestran que para los consumidores de edulcorantes podrían haber potenciales "efectos indeseables". Se mencionan: mayor riesgo de diabetes tipo dos, enfermedades cardiovasculares y mortalidad en adultos.
Sin embargo la recomendación no aplica a productos de higiene y cuidado personal que contengan alguno de estos edulcorantes, como por ejemplo pasta de dientes, crema para la piel y medicamentos. Lo mismo sucede con los azúcares bajos en calorías y los polioles (alcoholes de azúcar) ya que contienen calorías y por lo tanto no son considerados edulcorantes.