Las peleas dentro de las cárceles no son exclusividad de las películas o series. Suceden en la realidad y el último ejemplo tuvo lugar, en las últimas horas, en el penal de Bouwer, en Córdoba.
Dos bandos de reclusos se enfrentaron, en la noche del sábado, en el pabellón D4 del módulo de mediana seguridad, destinado a presos condenados. Según la información oficial, la riña ocurrió en un salón de uso común, donde internos se atacaron con diversos elementos, incluyendo "púas" caseras.
Como resultado de la pelea, al menos 10 presos sufrieron heridas de distinta consideración. Dos de ellos (Carlos Gustavo Toranzo y Rubén Oscar Echegaray) fueron trasladados a los hospitales San Roque y Córdoba. Uno quedó internado con custodia y el otro fue regresado a Bouwer.
Además, durante el enfrentamiento, los internos provocaron daños edilicios, entre ellos, la rotura de vidrios, luces y cámaras de seguridad. La situación obligó a que ingresaran al lugar efectivos de la guardia externa armados con escopetas que disparan balas de goma.
Por un lado, la Justicia realiza una investigación. Por otro, el Tribunal de Conducta Policial y Penitenciario inició un sumario interno. Una de las dudas es porqué los presos estaban a esa hora de la noche en un salón de usos comunes.