Homicidio agravado por el vínculo ya sea por acción u omisión. Esa es la acusación que pesa sobre Miguel Godoy y Brenda Carranza, los padres de Martina, la beba que murió luego de recibir una golpiza el fin de semana en Anisacate.
Al ver que la criatura de seis meses no despertaba, juntos la llevaron al hospital Arturo Illia de Alta Gracia el sábado. Desde allí la trasladaron al Hospital de Niños de Córdoba, adonde durante la tarde noche del domingo falleció.
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En Anisacate, los tres compartían una humilde vivienda. Si bien algunos los describen como vecinos "educados y amables", otras versiones indican que se escuchaban con frecuencia discusiones, peleas y llantos.
Aparentemente la joven era víctima de violencia. Carranza sería ama de casa, mientras que Godoy se ganaba la vida realizando algunos trabajos de albañilería.
Sin dolor