Hace cuatro meses, Liliana abrió el centro de estética en barrio Pueyrredón. Era 1º de diciembre cuando inició una nueva etapa en su vida, luego de quedarse sin trabajo en una empresa multinacional que cerró el año pasado.
Con el dinero que cobró de la indemnización, compró todos los insumos para prestar el servicio. Junto a su hija se pusieron manos a la obra y desde entonces se ganaron el cariño de sus clientas. Sin embargo, la inseguridad las golpeó y se quedaron con las manos vacías.
El pasado martes, delincuentes desvalijaron el centro de estética, ubicado sobre calle México al 1.200. Liliana se fue alrededor de las 13 y, horas más tarde, fue su hija a abrir y se encontró con un escenario desolador. Solo le quedaron los muebles y los diplomas.
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“Nos dejaron el negocio pelado”, contó la mujer en El Show del Lagarto. Los delincuentes se llevaron todas las herramientas, incluidos los adornos y hasta los frascos con galletas y caramelos. La cerradura estaba rota y el interior del local completamente vacío.
Le robaron más de 450 mil pesos en mercadería. Liliana “apostó a esto (centro de estética)” porque, según su relato, “no conseguía trabajo por su edad”. Todo su esfuerzo y dinero se fueron en un instante. Ahora están haciendo rifas para volver a empezar. “Vamos a seguir adelante como podamos”, dijo en un intento de no perder las esperanzas.
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