La tragedia que le costó la vida a María Grazia Costanzo (19) y Federico Cariola (22) en el camino Intercountries sigue generando polémica. Mientras se espera la declaración Francisco Catalano (23), el conductor imputado que manejaba el Volkswagen Vento, crece la discusión por los controles que podrían haber impedido el accidente.
Por el momento, se sabe que el responsable del auto dio alcoholemia positiva, aunque en niveles que no implican un agravante. Su vehículo dio entre cinco y seis tumbos y, según algunos testimonios cercanos a la investigación, el velocímetro quedó en 170 kilómetros por hora.
Otro dato sería clave para determinar la presunta imprudencia del conductor: los otros ocupantes del auto, entre los que estaban los sobrevivientes Mateo Feijo (22) y Camila Suárez (20), le habrían pedido que baje la velocidad antes del impacto.
Controles
Quien se sumó a la discusión fue el intendente de La Calera, Rodrigo Rufeil, que defendió a los controles que se realizan en la zona y pidió más compromiso de los padres: "Estoy preocupado y dolido por lo que pasó. Esto se podría haber prevenido, se pueden tomar precauciones desde la casa. Yo como padre tengo una hija adolescente y me levanto, la voy a buscar, sé con quién anda".
"El Estado ha dado pasos pero los padres nos tenemos que involucrar, tenemos que poner mano dura", dijo Rufeil.
Si bien aclaró que "el Estado por supuesto que puede tener algún tipo de responsabilidad", destacó que "no puede ser el único culpable". "Si mi hijo sale en un auto, tengo que saber con quién sale, por dónde viene. No se puede controlar que cada chico que salga del boliche salga despacio. El Estado ha dado pasos pero los padres nos tenemos que involucrar, tenemos que poner mano dura y que no salgan en un auto, que salgan en remis, y que vuelvan en buen estado", remarcó en Noticiero Doce.
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Consultado por los controles, Rufeil aseguró que "están y se hicieron", aunque dijo que en esa ruta su municipio no tiene jurisdicción. Por último, evaluó la situación de la noche de Córdoba y alrededores: "No hay ningún boliche en el que la salida sea ordenada. No podemos hacer que no haya ruido, gente, autos. Descontrol no hay. Nosotros no hacemos controles de alcoholemia porque los hace la Policía Caminera".
