Otra vez, la historia del cuento del tío vuelve a estar presente en medio de la preocupante situación económica que se vive en el país. Los jubilados vuelven a ser las víctimas de los especialistas en este delito. Una nueva estafa que parece interminable.
En esta oportunidad, un supuesto abogado en nombre de ANSES, obligó a Adriana a hacer una transferencia a través de un cajero asegurando que se trataba de un trámite por la reparación histórica. Ella siguió las consignas que recibía por teléfono y terminó sacando un crédito de 100 mil pesos que deberá pagar en 72 cuotas. En agosto tiene que empezar a pagar.
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Santiago Acuña, el profesional afectado, citó a la víctima en su oficina y se defendió en Arriba Córdoba, ya que utilizaron su nombre y número de matrícula para aprovecharse de la vulnerabilidad de la jubilada de barrio General Savio.
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“La voy a representar, voy a asumir su defensa y quiero llegar hasta las últimas consecuencias en virtud de que se está utilizando mi nombre. A mí esto me daña profesionalmente muchísimo. Además tengo una familia”, manifestó el profesional.
Acuña insistió en que lo que sucedió es grave. “Hay que alertar a los ciudadanos y sobre todo a los abuelos. Decirles que ANSES no llama por teléfono. ANSES no pide datos telefónicos”, insistió.
+ VIDEO: el abogado Santiago Acuña se defendió