El cabo Diego Osvaldo Bustos, al menos hasta nuevo aviso, no formará parte del cuerpo activo de la Policía de Córdoba. Hasta hoy, trabajaba en la Comisaría de La Calera.
La sospecha es que habría intentado convencer a la penúltima víctima de los abusos para que no lo denuncie. Una versión indica que podría tener una relación de amistad con Leandro Castañares, el único detenido acusado de las violaciones. Inmediatamente se confirmó la medida, Bustos entregó el arma reglamentaria.
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En la mira de la Justicia
Además, Bustos y otros dos policías del CAP 12 son investigados por el fiscal Tomás Casas. Se intenta determinar si hubo encubrimiento u omisión de los deberes de funcionario público.
Gabriela Vigna, secretaria de la fiscalía a cargo de la causa, aseguró en Telenoche que no descartan que haya más agentes involucrados.