Eran las cinco de la mañana, tres adolescentes estaban en la calle Alberto Williams al 4500, de barrio San Roque. Por razones que la policía trata de establecer, quedaron en medio de una pelea que terminó con numerosos balazos y heridos. La fatalidad le tocó a un chico de tan sólo 17 años que recibió un disapro en la cabeza. El joven fue trasladado de urgencia al Hospital Misericordia pero murió en el camino.
Otros dos adolescentes, de 15 y 16 años también resultaron heridos de bala. El más chico, llegó al mismo hospital con una herida de arma de fuego en el muslo izquierdo y el otro con un balazo en el brazo. Ambos están fuera de peligro y serán testigos clave para determinar qué pasó y quiénes son los responsables.
Aunque el hecho todavía es materia de investigación, la policía cree que se trató de una riña callejera. Aún no hay detenidos.