Desde el Colegio de Veterinarios cuestionaron que la intendencia de esa ciudad haya nombrado al profesional fallecido que no tenía relación con el maltrato al animal. El municipio defendió su actuación en el caso.
Había sido mencionado por autoridades de Villa Allende como el profesional al que el maltratador le utilizó la matrícula. “Paremos un poco la violencia”, la contundente reflexión del Colegio Médico Veterinario.
Ocurrió en una vivienda de Bell Ville. El hombre de 34 años realizaba los trabajos en un galpón que tenía equipado por completo.
Sucedió en San Martín de los Andes. El can era tirado de su cuello con una soga conectada al baúl del vehículo en movimiento.
Un grupo de personas halló al animal en medio de los pastizales cuando realizaba una caminata por la zona de la Quebrada del Batán.
Durante el juicio, el hombre se declaró culpable por aplastamiento de animales y complicidad. El video del maltrato se había viralizado en redes sociales.
Hermes Alejandro Moreyra rompió el silencio en exclusiva con El Show del Lagarto. Aseguró que desde la fiscalía “todavía” no lo llamaron y se defendió sobre la versión de que volvió a trabajar. “Estoy roto por dentro”, afirmó.
Telenoche dio a conocer que el falso veterinario que protagonizó el ataque tiene un empleo en un ámbito con mascotas. La palabra de la Sala de Derecho Animal sobre el caso.
El abogado de Hermes Moreyra, Gonzalo Ferreras, relató en Arriba Córdoba lo que su defendido le dijo que ocurrió: “Al palo lo utilizaron para tranquilizar al animal, que no está en mal estado de salud”. Pese a explicar que la perra fue “desmayada” de un palazo para ser controlada, aseguró que “no se la maltrató”. Cabe recordar que Moreyra está imputado por maltrato animal y el presidente del country San Isidro y una policía adicional, de encubrimiento.
Esperanza tiene el cuero levantado, varias heridas y garrapatas.
El Show del Lagarto dio a conocer lo que el imputado le habría comunicado a otra persona luego del lamentable episodio. En el mensaje de voz asegura que “sacaron viva a la perra”.
La cámara de seguridad registró el momento en que el animal comenzó a temblar hasta que terminó tumbado en el suelo. La mentira que le dijo el entrenador al dueño.
El animal se llamaba Festín Texano y pertenecía a la familia Iriarte de la localidad pampeana de Santa Rosa. El dueño, Miguel Iriarte, aseguró a un medio local que el encargado les dijo que “había muerto por un infarto”. Sin embargo, descubrió el horror al revisar la cámara de seguridad.
El Show del Lagarto accedió a nuevas pruebas que serán incorporadas a la causa por maltrato animal que tiene a un falso veterinario imputado.
Las dos empresas de seguridad describieron con detalle el violento accionar del falso veterinario y cuál fue el rol del empleado que ahora se encuentra de licencia.
Un hombre de 40 años fue interceptado por la Policía en barrio Renacimiento. Personal de Caballería rescató al animal.
Alejandro rompió el silencio con El Show del Lagarto y se desligó de la brutal golpiza. Dijo que el falso veterinario le colocó “una especie de inyección” al animal y denunció amenazas contra él y su familia.
Alejandro es quien ayudó a alzar al animal después de los palazos del falso veterinario. En diálogo con El Show del Lagarto, confirmó que Moreyra fue contratado por la administración y dijo que su tarea era solo sacarlo del predio del barrio cerrado.
Vecinos se movilizaron con sus mascotas para exigir justicia. Tras la imputación de Hermes Alejandro Moreyra, distintas fundaciones se presentarán como querellantes. La postura del municipio.
En diálogo con Telenoche Ivan Mochofky, integrante de la Sala de Derecho Animal del Colegio de Abogados de Córdoba, detalló las limitaciones que tiene la llamada Ley Sarmiento. “La sanción es la misma que el delito de daño, que implica destruir una cosa, no es nada en comparación al horror que vimos”, sostuvo. En esa línea, analizó los proyectos que hay para agravar los castigos judiciales por este tipo de casos y adelantó que se presentará como querellante en la causa que sacudió a Villa Allende.