En una audiencia especial, por primera vez el Congreso de Estados Unidos mostró un documento llamado “Fenómenos Anómalos No Identificados”. En el evento se confirmó que Argentina había informado a ese país sobre el supuesto OVNI tripulado por un humanoide descendió en un dique de San Luis.
En el evento llamado “Fenómenos Anómalos No Identificados: Exponiendo la Verdad” participaron figuras reconocidas en ufología mundial: Tim Gallaudet, contralmirante retirado de la Marina de EEUU, Luis Elizondo, exfuncionario del Departamento de Defensa, Michael Gold, ex administrador asociado de la NASA, y el periodista Michael Shellenberger, fundador del medio independiente Public.
En esta convención se recopilan datos para respaldar al mito en cuestión: documentos del momento, testigos, reportes oficiales, etc. Así, se comprobó que el caso de San Luis había sido enviado a analizar a Estados Unidos por el Gobierno de Argentina.
“Dichas expresiones fueron presenciadas por el Mayor Alberto Iannariello, de la V Brigada Aérea, con asiento en Villa Reynolds (San Luis), quien se hizo presente en el local de esta Delegación a tales efectos y a quien se le hizo entrega de las copias de los aludidos testimonios ‘con el objeto de elevar un informe a sus mandos naturales para su posterior remisión a los Estados Unidos de Norteamérica’, según sus manifestaciones”, expresa el documento en referencia a un avistamiento con supuesto humanoides en el interior de la nave, según publica Infobae.
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Qué pasó en San Luis
La madrugada del 4 de febrero seis hombres estaban a orillas del dique La Florida cuando, según ellos, se iluminaron el agua y el cerro por la aparición de una nave que flotaba a tres metros del suelo. Siguiendo la palabra de los testigos, se trataba de un objeto metálico con la forma de plato invertido que lanzaba luces verdes y rojas desde la parte superior.
El OVNI tenía 15 metros de diámetro y los testigos vieron que desde la nave descendió una escalerilla. Fue entonces que vieron un humanoide de dos metros de altura, con traje plateado y una curiosidad: tenía facciones humanas, pelos rubios que relucían tras la luz artificial.
Uno de los tripulantes levantó su brazo y, según entendieron los pescadores, fue un gesto de acercamiento, como si dos personas levantaran el pulgar. Al parecer la nave estuvo durante dos minutos detenida a unos metros de los pescadores. Luego levantó vuelo y se fue.
Personas que estaban en las cercanías del dique aseguran que esa noche vieron diferentes avistamientos. Los testigos Genaro reconocidos como Pedro y Ramón Sosa, Regino Perroni, Jacinto Lucero y Manuel Álvarez declararon ante la Policía Federal y la Fuerza Aérea Argentina.
Sus palabras fueron entregados a un oficial de la V Brigada Aérea, quienes se debía encargar de elevar un informe a EEUU.