Una mujer de 30 años, que tenía dos hijos, murió y su pareja quedó detenida porque sospechan que se pueda haber tratado de un femicidio. Los vecinos dicen que es un buen chico y que nunca habían escuchado nada raro. La policía la encontró tirada en la habitación muerta y el detenido declaró que había discutido y que ella se había caído y golpeado con la mesa de luz.