La fuerte suba en las facturas de energía eléctrica, sumado a la quita de subsidios nacionales, ya comenzaron a sentirla los comerciantes de Córdoba. La preocupación crece en medio de la recesión económica y una pyme cordobesa no sabe cómo seguir adelante.
Se trata de la fábrica de helados Wöllen que recibió la boleta de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) con un aumentazo: pasó de pagar 973.439,20 pesos en febrero a 1.791.768,60 en marzo.
“Venimos golpeados con este aumento, el cual ya veíamos que aumentaba progresivamente y nos llegó la factura con un aumento del 130 por ciento”, expresó angustiado Santiago Parrello, el dueño de la fábrica, en diálogo con Noticiero Doce.
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Aseguró que los “golpe” directamente en la rentabilidad y no lo pueden sostener. “No lo podemos prever, fue muy de golpe y ahora estamos haciendo algunas acciones para enfrentar esto”, agregó intranquilo por la situación.
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Insistió en que la realidad que atraviesan es dura porque trabajan en temporada y no fue buena debido a que las ventas cayeron un 25 por ciento respecto del año pasado. Pese a que intentaron remontarla, el incremento en las tarifas los complica sumado a las actualizaciones salariales, alquiler, proveedores, entre otros costos fijos.
El dueño de la pyme confesó que analizan bajar la producción para bajar los gastos: “Es lo único que nos queda”. Por el momento, no tienen pensado cerrar la fábrica: “No queremos llegar a eso, hay muchas familias que viven de esto. No podemos llegar a esa decisión”. “Lo último que queremos hacer es pagar lo que consumimos y seguir funcionando”, concluyó.
