Una denuncia por ruidos molestos terminó por desarticular una fiesta clandestina en Córdoba. En el lugar había 300 personas, entre ellas varios menores de edad.
El operativo se desarrolló en una vivienda de barrio Ameghino Sur, donde secuestraron equipos de sonido, luces y bebidas alcohólicas que eran comercializadas, precisaron fuentes municipales.
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Los inspectores advirtieron durante el procedimiento del domingo a la madrugada que el domicilio utilizado para la fiesta no contaba con salidas de emergencias. Tampoco había medidas de seguridad en el interior.
Clausurados reincidentes
En el marco de controles efectuados esta semana, agentes de la Municipalidad de Córdoba detectaron que habían quitado la faja de clausura colocada la semana pasada en el bar Punta Alvear.
“Habían sido retiradas en diversas oportunidades, violando la disposición municipal efectuada”, señaló un comunicado sobre la intervención de la Secretaría de Fiscalización y Control.
Ante esta situación las autoridades dispusieron una “custodia permanente para asegurar el cierre del establecimiento”, indicaron. La semana pasada el local fue clausurado por incumplir la habilitación que tenía.
Para levantarse la medida, los dueños deben abonar una multa económica, revertir las condiciones que marcaron las autoridades y esperar a que un organismo los autorice a reabrir, se había explicado desde el municipio. Cabe recordar que el lugar ya fue clausurado años atrás por irregularidades del mismo tipo.
En otro orden se informó que restituyeron la faja de clausura de Madero, otro local nocturno reincidente en las infracciones. Las fuentes destacaron que en ese establecimiento secuestraron equipos por 5 millones de pesos.