La edición por los 15 años del Premio Abanderados, como en cada año, tiene grandes candidatos. Y una de ellas es cordobesa que se destaca por el compromiso con la comunidad.
Este año, se postularon 700 personas que sostienen proyectos solidarios a lo largo y ancho del país. Un Jurado de Honor seleccionó a los 8 ganadores. Luego de la difusión de las historias de cada uno, se realizará la votación final para elegir al Abanderado del Año a través del sitio oficial.
Entre los 8 ganadores y candidatos al Abanderado del Año está la cordobesa Agustina Arata, creadora de Goodwill.
La iniciativa brinda atención médica primaria a niños con discapacidades como parálisis cerebral, epilepsia y síndrome de Down en zonas rurales con acceso limitado a servicios de salud. Cada tres meses, un equipo de 40 profesionales de la salud viaja desde la ciudad de Córdoba hasta Serrezuela para evaluar, atender y hacer seguimiento de más de 80 niños. También organizan donaciones de insumos médicos, sillas de ruedas, pañales y alimentos.
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El Premio Abanderados, impulsado por el Grupo Clarín, Fundación Noble y Luz Libre Producciones, busca visibilizar algunas de las tantas vidas solidarias y comprometidas de los argentinos, para alentar su tarea y también para inspirar al resto de la sociedad.
Esto es lo que distingue a los ocho ganadores de la 15a edición del Premio Abanderados.
Las historias de los otros candidatos:
Romper el círculo de la pobreza
Patricia Bertran lidera Imagina un mundo mejor, una organización que fundó en Venado Tuerto, Santa Fe, con el fin de impulsar la movilidad social de familias que se encuentran en situación de pobreza. Ofrece a las familias en situación de vulnerabilidad social talleres educativos y les brindan asistencia y acompañamiento. Actualmente trabajan con 54 familias. La organización cumple una década y la festeja con la historia de Simón, un joven criado en situación de pobreza, que participó del proyecto, y que se recibirá de abogado próximamente.
Rompiendo barreras
Diversamente Posibles ofrece oportunidades recreativas y deportivas para niños con discapacidad y sus familias, con el fin de que tengan un espacio de encuentro que trascienda las terapias. Ignacio Calabró, kinesiólogo con 12 años de experiencia trabajando con niños con discapacidad, se inspiró en su propia experiencia como padre de Luli, su hija con discapacidad motora severa, para fundar este proyecto.
Conocimiento al servicio de las comunidades
Guillermo Catuogno creó el LabTA, un laboratorio dependiente de la Universidad Nacional de San Luis abocado a transformar la vida de comunidades rurales, les ofrecen acceso a electricidad y agua y promoviendo el desarrollo local. Su modelo se basa en capacitar a estudiantes secundarios en tecnología, combinando aprendizaje y servicio en las comunidades. Ya brindaron 3.000 capacitaciones en escuelas de las provincias de San Luis, Buenos Aires y Chaco. También proveyeron electricidad y agua en escuelas rurales, centros de salud y comedores comunitarios de San Luis, en comunidades mapuches de la Patagonia y a 39 familias del Impenetrable Chaqueño.
Hockey para todas y todos
Silvina Forrester de Gorrissen, junto con Peter, su marido, crearon la Fundación Argentina de Hockey Inclusivo. Entrenan a 100 niños, niñas y adolescentes, dos veces por semana en el Polideportivo Onega y en el Pomar en la ciudad de Buenos Aires. La organización, además acompaña el desarrollo de iniciativas de hockey inclusivo en distintas provincias del país y realizan visitas a escuelas, clubes y profesorados. Silvina fundó Lionas y Liones al ver el impacto positivo que la práctica deportiva tuvo en su hija Clara, quien jugó al hockey desde los 5 años y logró, gracias a estar actividad, mejoras no solo físicas, sino especialmente en su bienestar, su vida social y en sus hábitos.
Libertad Eterna
Florencia Marin está abocada a asistir a niños, adolescentes y jóvenes en situación de extrema vulnerabilidad de la zona de Tigre, provincia de Buenos Aires. Desde la organización Libertad Eterna, trabaja en prevención y recuperación de adicciones, pero también en casos de abuso y la falta de cuidados parentales. La ONG cuenta con dos hogares convivenciales y dos establecimientos asistenciales a los que asisten más de 70 personas. Además, gestionan un centro comunitario con talleres, actividades deportivas y programas de finalización de estudios.
Medicina en el Chaco Salteño
El médico Alejandro Nolazco y sus compañeros del Hospital Británico quedaron impactados con el testimonio de Thomas Elkins, un colega estadounidense que se abocaba a asistir a poblaciones de riesgo en Ghana. Inspirados por esa tarea, crearon AMTENA, un programa para dar asistencia médica continua a comunidades vulnerables del Chaco Salteño, como wichí, chorotes y tobas, que tienen dificultades para acceder a servicios de salud.
Desde el 2000, viajan cinco veces al año, movilizan equipos de médicos voluntarios para realizar cirugías reconstructivas, laparoscopias y oftalmológicas en pacientes de comunidades aisladas que son trasladados al Hospital de Tartagal.
Todos podemos aprender
Felicitas Silva tiene clara su misión: asegurarse de que cada niño acceda a una educación que le permita soñar en grande. Con eso en mente se mudó desde Buenos Aires a Concordia, Entre Ríos y junto a su pareja Florencia, crearon Volando Alto, un proyecto que busca evitar la deserción escolar. Brinda acompañamiento educativo e integral para niños y jóvenes en situación de pobreza. Volando Alto asiste a 140 niños, 20 jóvenes y 85 familias con la colaboración de 35 voluntarios.