Este jueves el Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Córdoba tomó una determinación sin precedentes: anuló la prueba escrita de un concurso para cubrir cargos auxiliares de la Defensa Pública.
El motivo de esta decisión surge de una denuncia de la Asociación Gremial de Empleados Judiciales (Agepj). Según la misma, el defensor oficial e integrante del tribunal examinador, Eduardo Santiago Caeiro, le habría entregado por anticipado las preguntas del examen a cuatro empleadas de Tribunales II, quienes luego obtuvieron el máximo puntaje.
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Según la nota gremial que trascendió, dichos concursantes mantienen una relación de parentesco o académica con Caeiro, informó La Voz del Interior. Siguiendo estos datos, se trata de cuatro mujeres de la cuales una trabaja en la Cámara de Acusación, otra en la Cámara 12ª del Crimen y las otras dos en el área de la Defensa Pública. Además, una de ellas trabaja en la oficina del defensor.
Información extraoficial indica que una de estas mujeres habría “confesado” en un ámbito de confianza que obtuvo un borrador con las preguntas del examen por parte del defensor. Así se menciona en la denuncia del gremio. La misma generó una reacción inmediata del TSJ, que envió una orden a Secretaría de Sumarios Administrativos para que una investigación interna se ponga en curso.
Por último, independientemente de los resultados de la investigación, el concurso continuará y dicha prueba se repetirá más adelante.