Con el calor del domingo pasado Juan Adolfo Villagra (37) fue a pasar el día a la vera del río Suquía en el balneario El Diquecito, en La Calera. Poco después de las cinco de la tarde el hombre desapareció y nada se supo de él hasta este viernes en que lo encontraron muerto en un acueducto.
Villagra tenía tres hijos y solía frecuentar la zona de El Diquecito y El Colibrí con familiares y amigos en busca de aire fresco, en especial en los momentos de altas temperaturas. Eso mismo hizo el fin de semana pero con un desenlace fatal.
“Él sabía venir siempre, conocía cómo es acá, sabía nadar y todo”, aseguró su hermano en El Show del Lagarto mientras se desarrollaba la búsqueda tanto dentro del cauce como en la costa. “Venían a pasar el día pero no se quedaban a pasar la noche, era para pasar el rato y se iban”, comentó. Cuando se ausentó dejó su billetera con toda su documentación, señaló.
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El domingo 22 de diciembre a la noche, cuando advirtieron que no regresaba, dieron aviso a la Policía y se iniciaron los rastrillajes. La esposa, Cynthia Maldonado, contó que lo habían visto en un kiosco de la zona y reveló que en el recorrido con el Duar (Departamento de Unidades de Alto Riesgo) encontraron un buzo colgado y una gorra.
Fuentes policiales confirmaron el hallazgo sin vida cuando se cumplía el quinto día consecutivo de búsqueda. Estaba en un sector que alimenta la planta potabilizadora de La Calera y Sierras Chicas, a 120 metros del inicio del entubado.
El subcomisario Diego Saya, de la Dirección Bomberos, indicó que las tareas fueron “complejas porque se hicieron dentro de un acueducto de difícil acceso de 150 metros que presentaba fuerte correntadas”. Explicó que tuvieron que cerrar dos compuertas para poder disminuir el caudal y permitir el ingreso de los buzos.
Desde que tomaron conocimiento de la desaparición manejaban varias hipótesis, teniendo en cuenta que no hubo testigos que lo hayan visto entrar al agua. Las autoridades señalaron que el domingo el río estaba crecido por la apertura de las válvulas del dique San Roque.
