Un brutal femicidio sacudió a Ingeniero Budge el lunes. Enzo Daniel Chamorro (26) está acusado de matar a Malena Soto (25) en un hotel alojamiento de esa ciudad bonaerense. Escapó con la excusa de que tenía que buscar algo en su auto.
El personal del lugar revisó la habitación minutos después y se dio con el horroroso hallazgo: la joven estaba tendida sobre el inodoro con un corte y sin signos vitales. Más tarde, la Policía Bonaerense encontró a Chamorro en el centro de Lomas de Zamora y lo detuvo. Está imputado por “homicidio agravado por el vínculo”.
Quién es Chamorro
Con el correr de las horas, se supo que el principal sospechoso del asesinato era jugador de la Primera División en el club Camioneros, que está disputando el Torneo de la C del fútbol argentino.
Chamorro se desempeñaba como volante por izquierda y había sido figura en algunos de los partidos. Lo ficharon en 2019 y estuvo allí hasta 2024, cuando quedó libre. En 2020 debió salir de las canchas un tiempo por una rotura en el tendón de Aquiles, según precisaron en las redes de la institución en ese entonces.
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Una de sus últimas convocatorias fue el 12 de mayo del año pasado, cuando Camioneros enfrentó a Club Náutico Hacoaj e igualó 2 a 2 por la fecha 12 del Torneo Promocional Amateur.
Su hermano Ezequiel se refirió al femicidio en Crónica TV y aseguró: “Enzo pasó 23 años de su vida jugando al fútbol”. “A nosotros nos toma muy de sorpresa, pueden preguntarle a cualquier persona que lo conoce”, expresó. El martes Chamorro se negó a declarar y permanecerá detenido por orden del fiscal de Lomas de Zamora, Jorge Grieco.
Femicidio
El asesinato de Malena Soto ocurrió el lunes en la habitación 17 del hotel alojamiento Satélite, de Ingeniero Budge. Horas antes de que suceda, las cámaras captaron a la pareja pagando el turno en el ingreso.
Ambos ingresaron al cuarto asignado y alrededor de las 17:30 salió solo Chamorro, que se acercó a la recepción y pidió salir para buscar algo en su auto. Como no se lo permitieron, escapó saltando un portón.
Su reacción alertó a los trabajadores, que fueron a la habitación y se dieron con el cuerpo de Soto tendido en el baño con una herida fatal en el cuello. Rápidamente llamaron a la Policía, que identificó a la víctima por su tarjeta Sube.