Enrique Piñeyro llega a Córdoba en una nueva faceta que lo tiene como protagonista en el teatro y en su paso por Seguimos en El Doce compartió una charla en la que habló de todo. Piloto, cineasta, médico y activista, reflexionó sobre la tragedia de Lapa que en 1999 marcó un antes y un después para la aviación en el país.
“La connotación de Lapa siempre estuvo muy presente, tengo amigos a partir de eso en Córdoba. Siento que lo de Lapa fue algo muy avasallador en la vida de Córdoba, en la mía, en la de mucha gente y aún no cordobeses”, afirmó.
Piñeyro fue piloto de la empresa pero renunció poco antes de que el vuelo 3142 se estrellara en el Aeroparque Jorge Newbery cuando partía hacia el aeropuerto cordobés. Desde antes del accidente denunciaba irregularidades que luego las mostró en distintas producciones.
Admitió que a partir de la tragedia hubo cambios notorios, en particular desde que presentó Fuerza Aérea SA. “Porque con Whisky Romeo Zulu decían ‘bueno es una ficción’, que en realidad la hice más suave para que fuera creíble porque las cosas que yo viví en Lapa si las cuento de verdad no me las cree nadie”, aseguró.

“Hoy tenemos una autoridad de aviación civil y es un paso gigante”, sostuvo, aunque advirtió que “seguimos atrás” en muchas cuestiones vinculadas a la inversión en infraestructura. “Estamos mucho mejor, hay avances, todo se volvió más normal pero nos falta un montón”, consideró.
En esta oportunidad Piñeyro llegó a la ciudad para hablar de su obra “Volar es humano, aterrizar es divino” con la que se presentará este sábado en el Teatro del Libertador.
El Aeropuerto de Córdoba
Consultado por qué se cierra el Aeropuerto de Córdoba cuando hay niebla, Piñeyro insistió en marcar la falta de inversión en recursos tecnológicos y de logística.
“Me ha pasado de estar dos horas esperando en Aeroparque porque había lío, chequeando meteorología en Córdoba. Se nos vence el combustible vamos a Córdoba y entramos acá con 500 pies porque la meteorología no estaba actualizada”, recordó de su época piloteando.
Y añadió: “Entramos porque entramos, pero en Córdoba hubo un desmadre monumental con lo de la falta de información que fue el Avianca que terminó en Catamarca, un Lufthansa en Porto Alegre, uno de Aerolíneas en Mendoza que se le apagó un motor en el rodaje, todo el mundo se quedó sin combustible ese día porque la información no estaba".