El Tano fue invitado al El Show de la Monada para meterle todo el ritmo al lunes feriado. Entre música, risas y muchas anécdotas, dejó una joyita de un evento más que importante en su carrera, el momento en el que llegó a La Fiesta.
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El cantante había ganado un concurso en el programa televisivo Telemanías y fue ahí donde despertó el interés en el Pato Lopéz, quien en ese entonces trabajaba como manager de la banda junto a Cristian Amato y Gustavo Castellaro.
“Llegué tarde, con todas las uñas sucias, con una camioneta indocumentada, y yo al palo por la Colón, estacionando en un lugar que no sé como no me la llevaron”, narró el artista sobre el momento en el que decidió ir a probar suerte a la banda. Lo curioso al momento de ingresar a la productora, el cantante confesó, ante el asombró de todos, que no conocía a una de las figuras más emblemáticas del cuarteto. “Había una foto gigante del Loco Amato y digo, ´este debe ser el copado porque mirá la foto que tiene´”, fueron las palabras del artista.
Si bien no lo conocía, el Tano comentó que si lo había visto anteriormente haciendo el “paso de ki ki”. “Yo decía, que hijo de pu… estos guasos. La gente enloquecida, daba vuelta para allá por todos lados, y yo decía ´me están cargando esto no es verdad, está todo arreglado´”.
El invitado, cuando ya estaba asentado en la banda, se animó a consultarle al Loco sobre una duda que lo inquietaba. “Porque la gente da vueltas en cada tema bailando”, refiriéndose a la pista, a lo que Amato le consultó cuál había sido su primer baile y el Tano le confesó “este”.
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El invitado contó cómo fue la confusión cuando lo contactaron. “Me llaman y me dicen ´hola mira queremos hablar con vos somos de La Fiesta´”, me habían llamado al taller mecánico porque yo, al no tener teléfono, había dado el número del taller donde trabajaba”.
Romero al no saber de la existencia de la banda, pensó que el llamado recibido era para cantar en un evento privado. “Yo le digo ´mirá si es una fiesta de 15 puedo cantarte no sé, algo. Si es para un casamiento…´”, narró entre risas la respuesta que le dió a quien en aquel entonces, era el manager.
Al enterarse que el llamado se trataba para sumarse a una banda de cuarteto, rápidamente desistió. “No te voy a servir, no te voy a servir, yo voy a hacer cagada”, fueron las palabras del protagonista, ya que en aquel entonces se dedicaba al Rock. “Cuando le conté a mis compañeros que no iba a ir, me agarraron de los pelos y le dijeron al productor “aguante que ahí va””, agregó.
Su único contacto con el cuarteto
Muchos años atrás Romero había presenciado un baile de Sebastián, al cual había asistido con su padrino. Lo que mas sorprendió de aquella función al Tano Romero, fue la presencia que marcaba el Mosntruo, y la expectativa que generaba en el público. Esta experiencia le reveló su deseo más profundo. “Yo quiero ser ese que está ahí arriba y que la gente me este esperando”, comentó el protagonista de la anécdota.
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