Cuando uno tiene entrevistas de trabajo, la pregunta que no figura en el cuestionario es cuánto medís, sino cuál es tu experiencia en el rubro. Sin embargo, varios estudios reflejaron que las personas altas ganan más que las de menor estatura. ¿Acaso es un requisito para conseguir empleo?
La primera investigación fue realizada por un sociólogo canadiense, Malcon Gladwell. En una empresa llamada Fortune 500 tomó como referencia a los CEOs hombres. Allí fue cuando descubrió que le llevan casi 8 centímetros a los empresarios exitosos.
Tras esta repercusión, el gobierno alemán comprobó que las personas de mayor estatura tienen una probabilidad del 0,15 por ciento de ser jefes, que de trabajar en relación de dependencia. Además, detectaron que aquellos que se mostraban más felices eran los altos y no los petisos. ¡Increíble! Un par de centímetros brindaba un aumento de 0,39 por ciento.
Después de tantos resultados, National Bureau of Economic Research, terminó por comprobar que todo era verdad. La altura es una variable de éxito económico. La investigación que realizaron en Indonesia en diversos trabajos, con 5304 hombres, durante siete años, arrojó un resultado magnífico. Cinco centímetros significaba un aumento de 0,8 dólares por hora para el trabajador.
El objetivo general. Los estudios tenían como finalidad concientizar sobre la importancia de la buena alimentación en la infancia.