Insólito e indignante en partes iguales. Así se podría calificar el despido arbitrario de Tamara de los Santos de una panadería en la localidad bonaerense de Brandsen. Tras compartir un meme en el que bromeaba acerca de la inexistencia del pago del aguinaldo por parte de su empleador, la joven perdió su fuente de ingreso por decisión de su exjefe.
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El chiste que publicó la chica en su cuenta de Facebook mostraba a un hombre sosteniendo un cartel que dice: "Lo que a vos te divierte, a otros nos lastima. No subas que cobraste el aguinaldo". Y a la imagen le agregó un texto: "Jajajajaja ya quería la ilusa que le paguen aguinaldo. 'No soy Sapucay', le mandó".
Sapucay hace referencia a un empresa avícola local que, de acuerdo a lo explicado por Tamara a La Nación, tiene a sus empleados en regla.
La publicación del meme de Tamara surgió porque el exjefe de la joven le había dicho que le iba a aumentar el sueldo "si le agarraba la mano" a sus labores en la parte de producción, teniendo en cuenta que previamente ella se desempeñaba en el sector de atención al público.
Como el tiempo pasó y el incremento del salario no llegaba, la protagonista de la historia preguntó sobre el tema, pero recibió la respuesta negativa de su exempleador, que argumentó que no podía pagarle ni el aguinaldo porque iba a abrir otros dos locales nuevos.
Además, cabe destacar que Tamara trabajaba en negro, sin viáticos y sin otros derechos laborales básicos.
El chat del despido
Una vez publicado el meme, el exjefe se comunicó con Tamara vía Whatsapp y se dio el diálogo en el que el exempleador se quejó por la publicación del chiste, por más que la joven no mencionó el nombre de la panadería y que su perfil de Facebook es privado.
El chat se produjo mientras la trabajadora estaba decorando tortas en el negocio. “Me fui re llorando. No lo vi más a él. No me pagó más. Ni mi liquidación, ni mi aguinaldo. Me dijo que me iba a hacer un plan de pago, y ahí quedó", explicó a La Nación.
“El viernes pasado le mandé un mensaje preguntando otra vez por mi liquidación y me clavó el visto”, agregó quien tiene una hija de cinco años y necesita trabajar para tener independencia económica.
La situación se viralizó en las redes sociales y no tardaron en aparecer personas que también habían trabajado en la panadería y habían sufrido toda clase de irregularidades laborales.