¿Cómo eligen las compañías automotrices el nombre de un auto? Seguramente, piensan, debateny analizan mucho para seleccionar la palabra que identifique un vehículo. Sin embargo, a veces, las cosas no salen como se esperaba. Y hay motivos ajenos que pueden provocar que ese nombre se vuelva en contra para el producto.
Seguramente, eso pensaron los responsables de Tata Motors, que decidieron rebautizar a su flamante "Zica" debido al temible virus del "Zika" declarado emergencia por la Organización Mundial de la Salud. Ahora, se llamará "Tiago" y la empresa explicó los motivos:
"En solidaridad con los sufrimientos provocados por el reciente brote del virus del zika, Tata Motors, como compañía socialmente responsable, decidió cambiar la marca del coche", dice el comunicado oficial.
Otros casos:
Uno de los más recordados en Argentina es el del Mitsubishi Pajero. El nombre hacía referencia a un felino también conocido como gato de los pajonales o gato de las pampas. Finalmente, la compañía decidió renombrarlo como Montero en Sudamérica.
Nunca sabremos cómo los directivos de la japonesa Mazda aprobaron el nombre de su Mazda Laputa para el idioma español. Por razones lógicas, no se vendió en Latinoamérica y sólo fue comercializado en Estados Unidos. Fue presentado en 1999 y retirado del mercado en el 2006.
El Nissan Moco es otra "genialidad" asiática. Se trató de un pequeño auto que, encima, venía en color verde.
"El Moco lo puedes guardar en cualquier sitio", era el eslogan de campaña de lanzamiento en Japón. En Europa le cambiaron el nombre y lo llamaron Cube.
Otro caso extraño fue el del Volkswagen Jetta y no por la forma de decirle a la "boca" en nuestras latitudes. Su pronunciación fonética era "yeta", sinónimo de mala suerte. Por eso, los alemanes le cambiaron el nombre por el "Vento" que acá conocemos.
El Hyundai Scoupe también fue rebautizado pero tarde. Nació en 1988 y recién en 1995 le cambiaron el nombre para evitar que sonora como "escupe". Le quitaron la primera letra y quedó como Hyundai Coupé.
Hace 50 años también pasaba lo mismo. Uno de los primeros casos fue el del Lancia Marica. Fue presentado en el Salón del Automóvil de Turín en 1969. Acá no llegó a venderse.
Fuente: Infobae.