Wu Lien-teh tiene una historia que hoy toma una relevancia muy particular. Nació el 10 de marzo de 1879 en Penang.
Fue el primer estudiante de ascendencia china en estudiar en la Universidad de Cambridge. Al finalizar sus estudios comenzó a trabajar en China, en la Facultad del Ejército Imperial.
Fue durante ese trabajo que se desató una enfermedad en el norte del país asiático que nadie conocía y por lo que las autoridades le pidieron a Wu Lien que investigara.
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En ese contexto es que se transformó en la primera persona que pensó en una forma de barbijo para proteger a sus compañeros de trabajo y evitar contagios masivos. Frente a la peste, Wu lien convenció a sus compañeros que la enfermedad se transmitía a través del aire. Por eso comenzaron a taparse el rostro con vendas pero se les caían.
En ese momento, Wu Lien diseñó una mascarilla con dos hilos a los costados para poder atarlo y que no se les cayera mientras trabajaran. Estaba hecha con algodón, gasa y varias capas de tela para que puedan respirar pero impidiendo el ingreso del posible virus.
Ese es el primer antecedente del barbijo que hoy conocemos y que todos utilizamos de manera masiva desde que comenzó la pandemia del coronavirus.
En 1935, Wu Lien-teh fue el primer malasio nominado para el premio Nobel en Medicina por su trabajo en el control de la peste neumónica. Fue también el responsable de diseñar un plan de trabajo que incluía cuarentenas, hospitales de campaña y restricción de viajes para impedir la propagación de la enfermedad. Esas medidas fueron fundamentales para poner fin a la pandemia que pasó a la historia como la Plaga de Manchuria ocurrida en 1911.
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Sorprende la importancia de esas experiencias en la situación actual. Sobre todo porque hasta ese momento sólo se sabía que era una afección neumónica muy contagiosa de persona a persona, a través del aire.
Es por todo esto que el doodle de Google hoy le hace un homenaje contando su historia.