Un estudio sobre el ajo realizado por investigadores de la Universidad de Stirling de Escocia y la Universidad Charles de Praga involucró a hombres y mujeres y arrojó resultados sorprendentes.
Durante una semana se les dio a 42 varones distintas cantidades de ajo para comer y almohadillas para recoger el olor.
Las mujeres fueron las encargadas de “apreciar” los aromas. Algunos habían comido ajo crudo y en cápsulas en un lapso de 12 horas, mientras que otros no consumieron el alimento durante el mismo período.
A ellas se les pidió que calificaran a los hombres en términos de atractivo, simpatía, intensidad y masculinidad. Lo curioso fue que se destacaron los hombres que consumieron más ajo, cuyos olores corporales calificaron como “más atractivos y menos intensos”.
"Ciertamente, el olor del aliento desempeña un papel crucial en la mayoría de las interacciones sociales, pero el olor axilar humano es también un factor importante en las relaciones íntimas", escribieron los autores del estudio.
El profesor Craig Roberts, líder de la investigación, indicó que este resultado podría estar relacionado con los beneficios del alimento a la salud: "El vegetal está lleno de nutrientes y vitaminas, puede ayudar a evitar los resfriados e incluso aumentar el rendimiento atlético, entre otras cosas”.
Roberts agregó: "Desde una perspectiva evolutiva, la formación de preferencias para los olores corporales asociados con la dieta fue posiblemente moldeada por medio de la selección sexual”.
Desde siempre se señaló al ajo como poseedor de múltiples bondades para la salud, como sus efectos antioxidantes, inmunoestimulantes, cardiovasculares, bactericidas y anticancerígenos. Pero ahora, se suma uno más que seguramente alentará a más de uno a consumirlo: el sexo.