En 2013 la familia Adamo Guerra recibió una terrible noticia: el italiano dejó una carta de suicidio en donde anticipaba que se lanzaría al mar Adriático. Sus últimos rastros fueron hallados en el puerto de Ancona, en su auto abandonado. La Policía inició la búsqueda del cuerpo sin resultados y lo declaró muerto.
Pero lo que parecía una trágica historia tuvo un inesperado giro esta semana, 10 años después. El programa de televisión Quien lo ha visto confirmó que Guerra no sólo está vivo sino que además habita en la paradisíaca isla Patras, en Grecia.
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Las sospechas de su expareja surgieron el año pasado. “Mi abogado me llamó y me dijo que mi marido no era una persona desaparecida”, detalló la mujer. Explicó que en ese entonces encontraron un registro en el que el italiano había solicitado la residencia griega.
Llena de dudas, acudió a la productora del programa mencionado. Los periodistas dieron con el desaparecido y al ser confrontado este les rogó que se retiraran y no contaran su historia. Aparentemente, estaba huyendo de importantes deudas.
“No es un hombre, ni un padre. Ha sido abuelo y ni siquiera lo sabe”, sostuvo su expareja al enterarse de lo ocurrido.