La cirugía mamaria es la operación más realizada en todo el mundo, según la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica y Estética. Cada año, 1.7 millones de mujeres van al quirófano para hacer crecer sus pechos.
Numerosas actrices, modelos y cantantes de distintos países del mundo se la realizan para mejorar sus curvas. Sin embargo, el doloroso procedimiento y la lenta recuperación son factores que juegan en contra.
Por eso, el crecimiento de una alternativa más senclla parece haber llegado para quedarse. Se trata de una inyección de suero fisiológico compuesta de agua, electrolitos y algunas sustancias como glucosa, que lograr expandir el tejido mamario.
Esta intervención nació en Estados Unidos como una especie de muestra "no gratis". Era una forma de demostrar a las mujeres cómo quedarían después de la cirugía de senos. Sin embargo, con el paso del tiempo, comenzó a popularizarse como una mejor alternativa para ocasiones especiales.
Cirujanos plásticos de Nueva York ya promocionan este proceso que tarda sólo 20 minutos y figuras como Kendall Jenner y Miley Cyrus ya probaron tener sus senos más grandes sólo por un día.