Al igual que Ulises volvió a Ítaca, Coco también logró terminar su odisea y emprendió el trecho final de su regreso a su hogar, en Córdoba.
La historia del perro se viralizó la semana pasada, luego de que quedara varado en el aeropuerto de Ezeiza. El animal tenía la vacuna antirrábica vencida por lo que el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) le negó la circulación.
El drama escaló cuando las autoridades estuvieron por deportarlo a Colombia e incluso se habló de la posibilidad de tener que sacrificarlo. Finalmente, se resolvió vacunarlo y exigir una cuarentena de una semana.
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Este jueves se cumplió el período dictado. El animal pudo reencontrarse con su dueño, Franco Gavidia, y los dos iniciaron el viaje en auto a Córdoba.
Qué dijo el dueño
En diálogo con medios de Buenos Aires, Gavidia detalló que tras su llegada a casa la mascota deberá seguir aislada durante 21 días. “No va a poder tener contacto con otros perros ni nadie que no sean sus dueños”, explicó.
Además, deberá ser controlado por un veterinario una vez por semana durante ese mismo período. Y luego será visitado por un miembro de SENASA, que certificará su buen estado.
Sobre los hechos, el dueño dijo: “Fue una locura, pero quedo muy contento con el apoyo de la gente y la empatía de los medios. Ojalá todo esto sirva para mejorar las instalaciones y que haya un lugar para tener en cuarentena a los perros en casos como este”.
Gavidia también dijo que no cree que Coco vuelva a viajar en un futuro cercano. “Por ahora, no lo muevo más”, concluyó.