Muchas veces, las redes sociales muestras fotos falsas y con mucha edición. Algunos usuarios aclaran que “no tiene filtro”. Sin embargo, la mayoría de las imágenes dejan entrever que nada de lo que se muestra es real. Al menos con aquellas personas que buscan imitar el “cuerpo perfecto” para poder sentirse seguras y no ser rechazadas.
Para ello utilizan estrategias que están a la vista, como por ejemplo, el famoso programa de Photoshop. Sin embargo, nadie es perfecto y así lo dejó demostrado Anna Victoria, una conocida instructora de fitness. Dejó en evidencia lo fácil que es engañar a la gente compartiendo una selfie de su cuerpo: una pose “normal” y otra en la vida real.
La realidad virtual muchas veces es muy deseada y al bajar a la realidad la frustración es el primer sentimiento. “Yo el 1% de las veces versus yo el 99% del tiempo. Me encantan ambas fotos por igual. Buenos o malos ángulos no cambian su valor”, escribió en la publicación.
Los cuerpos delgados, sin celulitis ni estrías nos invaden en Internet. Por eso se animó a desafiar a las mujeres asegurando que todo eso no es nada “por lo que haya que disculparse, avergonzarse ni obsesionarse con eliminarlos”.