La decisión de escribir en grupos de WhatsApp sobre otras personas puede tener consecuencias impensadas. Su uso irresponsable es un tema de debate ya que a veces las cosas que se publican se descontrolan por completo.
En España, un caso llegó a la Justicia con resultados que hacen reflexionar. Ocurre que un Juzgado Penal de Vigo condenó por el delito de calumnias a una madre, que deberá pagar una multa e indemnizar a la profesora de su hijo que la denunció por daño moral.
El mensaje que la Justicia comprobó como enviado a ese grupo es el siguiente: "Esto es lo que os voy a decir lo que está sufriendo mi hijo. La profesora se dedica a zarandearlo de malas formas, a tirarlo del brazo, se burla de él, le tira las fichas del puzzle al suelo, le come el bocadillo...Con esto os quiero decir que controléis a vuestros hijos que le preguntéis por esta individua y si pasa con alguno más tenemos que hacer fuerza entre todos y plantarle cara".
En la resolución judicial se agrega que además la madre dijo que el niño "está con miedo". Por todo esto, la magistrada dijo que la madre escibió esos mensajes "con ánimo de atentar contra la propia estimación" de la profesora y atribuyéndole una forma de actuar con el niño que es "intencionada, desproporcionada, innecesaria e injustificada" y que "va más allá de la crítica legítima que cabe hacer" respecto a su desempeño como docente.
La madre de alumno ahora deberá pagar una multa de 630 euros (unos 10.566 pesos argentinos) y un euro en concepto de indemnización por daño moral.
A pesar de que la mujer pidió perdón dos semanas después de haber enviado el mensaje, su texto ya se había extendido por todo el colegio provocando una gran polémica. La profesora no aceptó las disculpas y decidió ir a la Justicia.
Primero, fueron a una conciliación, que no llegó a buen puerto por lo que un año después, el caso terminó en un juicio y la madre, condenada. Una historia para reflexionar y pensar muy bien dos veces antes de hacer publicaciones sobre personas en las redes sociales.