De solo ver las imágenes, la situación da pánico y miedo. El hombre, que estaba al frente de un grupo de turistas en China, no pudo disimular el terrible momento al ver como se rompía la estructura de cristal construida a 1.200 metros de altura.
La pasarela está ubicada en la ladera de una montaña y es uno de los principales atractivos de Taihang Este, en la provincia china de Hebei. Por supuesto este paseo no es apto para personas que padecen de vértigo.
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El hombre que al pisar una de las placas de vidrio, empezó a resquebrajarse, tuvo la reacción de tirarse al piso y comenzar a gritar desesperadamente. Mirá el video.
Cuando logró tranquilizarse un poco, se dio cuenta de que había sido víctima de una trampa diseñada por la empresa que construyó la estructura.
Los paneles eran en realidad pantallas que, al sentir el peso de las pisadas, proyectan la imagen de un vidrio rompiéndose.
La broma fue pensada por los constructores y es utilizada como un recurso de marketing para atraer a más turistas, aunque no es muy oportuno el chiste a tantos metros de altura.