Dolor total en el mundo del rugby tras confirmarse la muerte de Shane Christie, ex jugador de los All Blacks, los Highlanders, Tasman y los Māori All Blacks.
El ex ala, que tenía 39 años, fue hallado sin vida este martes por la noche en Nueva Zelanda. La Policía indicó que la causa está bajo investigación, aunque medios locales como New Zealand Herald informaron que se trataría de un presunto suicidio.
+ MIRÁ MÁS: Franco Molina tras el triunfo histórico ante los All Blacks: “No estamos lejos de ser campeones del mundo”
Christie había desarrollado una sólida carrera en el rugby profesional: disputó 29 partidos con los Highlanders entre 2014 y 2017, además de 73 encuentros con Tasman y ocho cotejos con los Māori All Blacks.

También integró el staff técnico de los Highlanders como entrenador de defensa en 2021 y 2022, y trabajó en equipos masculinos y femeninos de Tasman.
En 2017, con apenas 32 años, Christie se vio obligado a retirarse por los graves síntomas derivados de repetidas conmociones cerebrales. Desde entonces, se dedicó a impulsar la investigación y la concientización sobre los efectos a largo plazo de los traumatismos craneales en el deporte.

Él mismo había reconocido sospechar que sufría encefalopatía traumática crónica (ETC), una enfermedad neurodegenerativa que también ha sido documentada en jugadores de fútbol americano.
New Zealand Rugby expresó en un comunicado su “profunda tristeza” por la noticia conocida en las últimas horas: “Era un apasionado del entrenamiento y cada vez que la comunidad del rugby pierde a uno de sus miembros, se siente profundamente”.