Sin pena ni gloria. Así fue el paso de Daniel El Hachita Ludueña por Talleres. El talentoso volante de 34 años llegó al club de barrio Jardín en julio de este año, como flamante refuerzo para la temporada 2016/2017 tras el regreso del equipo a Primera División.
Pero la realidad estuvo lejos de las expectativas (talento intacto, pero flojo físicamente) y el cordobés terminó jugando muy pocos minutos: tuvo acción en solo cuatro encuentros, ninguno como titular. Para no tenerlo parado, el enganche cordobés disputó algunos partidos en la reserva.
Por eso, a pesar de que tenía contrato por un año, la T comunicó que se acordó la desvinculación de Ludueña, "quien ya no continuará el próximo semestre".
El Hachita continuará su carrera en el Tampico Fútbol Club de la segunda división de México, país donde jugó desde 2005 hasta el 2016. El caso de Ludueña es similar al de Matías Vuoso, el delantero de la selección mexicana que llegó a Talleres con 34 años y nunca pudo ponerse a punto.