Ya no sorprende ver a esta selección en los primeros planos del fútbol mundial. Chile venció a Portugal por penales y avanzó a la final de la Copa Confederaciones. El nuevo logro tiene nombre y apellido: Claudio Bravo. El arquero atajó los tres penales que le patearon en la serie.
En los 120 minutos (90 del tiempo regular y 30 del alargue), el campeón de América había sido superior al de Europa, pero no lo pudo reflejar en el resultado. Una de las chances más claras para la Roja: los dos palos consecutivos cuando se terminaba el partido.
Luego del 0-0, el equipo de Juan Antonio Pizzi sacó su chapa ganadora -mal que le pesó a la Selección Argentina- desde los 12 pasos. Bravo atajó los remates de Quaresma, Joao Moutinho y Nani. Cristiano Ronaldo ni llegó a patear.
En contrapartida, Arturo Vidal, Charles Aránguiz y Alexis Sánchez convirtieron sus penales. Ahora la Roja enfrentará en la final al ganador del partido entre México y Alemania, que jugarán este jueves.