El Gobierno de Japón informó este jueves que los Juegos Olímpicos no tendrán público en los estadios. La decisión generó mucha desilusión entre los espectadores, ya que se habían vendido más de 900 mil entradas. El torneo comenzará el próximo 23 de julio y finalizará el 8 de agosto.
La medida se debe a un rebrote que se produjo en el país nipón y las restricciones comenzarán a partir de la semana próxima en la ciudad de Tokio, misma que va a albergar la mayor competencia olímpica. El primer ministro del país asiático anunció también el estado de alerta desde el 12 de julio hasta el 22 de agosto por la escalada de casos.
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Durante las reuniones que se hicieron estuvo presente el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, y respaldó las resoluciones que se tomaron. El primer ministro nipón aseguró estar preocupado por la variante Delta proveninete de la India, ya que se trata de una mucho más contagiosa.
Como medida preventiva, las máximas autoridades de Japón ya habían tomado la determinación de no dejar ingresar a extranjeros que quisiesen estar presentes para los Juegos Olímpicos. Esta decisión fue para prevenir la llegada de personas que puedan estar infectadas y desaten una nueva ola en toda la isla.
Está claro que desde el país asiático no quieren arriesgar nada. Si bien es de las naciones que menos muertos tiene con 15 mil desde el inicio de la pandemia, Japón tiene un ritmo de vacunación muy lento. Apenas un 15% de la población total se encuentra inmunizada.